jueves, 25 de octubre de 2018

Vinos en latas y barriles: la opinión del campeón argentino de los sommeliers. Ayer, el INV autorizó a que se expenda "tirado" como la cerveza. Martín Bruno recomienda cómo tomar el vino en estos nuevos envases y analiza cómo va a impactar en el mercado.

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Vinos en latas y barriles: la opinión del campeón argentino de los sommeliers.

Ayer, el INV autorizó a que se expenda "tirado" como la cerveza. Martín Bruno recomienda cómo tomar el vino en estos nuevos envases y analiza cómo va a impactar en el mercado.

El vino en lata, si bien no es el envase más tradicional ni elegante, es una alternativa válida para proponer una forma de consumo más descontracturada. En países como Australia, Italia, Estados Unidos y otros, hace rato ya están instaladas y son muy bien recibidas por el segmento más joven de los consumidores, los millennials. Valoran de este tipo de envase la posibilidad de ir con ellos a lugares donde no se permite ingresar con vidrio, la mayor facilidad de reciclaje y el precio más accesible, además de verlo como una forma de consumo menos pretenciosa.
En Estados Unidos, por ejemplo, esta forma de presentar y consumir el vino creció un 43% entre septiembre de 2017 y el mismo mes de 2018. Existen, blancos, tintos, rosados y espumosos envasados en lata, además de cocktails a base de vino listos para beber. En general, lo que más se encuentra en latas son vinos que se disfrutan más bebiéndolos fríos.
Creo que es un gran paso en el necesario camino de acercar el vino a las nuevas generaciones de consumidores. La posibilidad de envasarlo en latas o barriles de hasta 50 litros es una forma muy interesante de fomentar el consumo de vino en bares y cervecerías, espacios en los que salvo raras excepciones, el vino prácticamente no tiene un lugar ganado.
Martín Bruno. Para el sommelier, el formato de lata o barril es una buena opción para los vinos jóvenes (Diego Díaz)
Falta tiempo y experiencia como para tener certeza de si este formato va a ser viable o no para vinos con posibilidad de guarda, pero hoy es una muy buena opción para vinos jóvenes.
Por otro lado, al ser un recipiente herméticamente cerrado, los vinos en lata pueden presentar problemas de reducción. Es decir, que por falta de interacción con el oxígeno, los aromas se presentan más cerrados y, a veces, hasta con algo de olor a azufre. Sin embargo, esto se resuelve muy fácilmente: sirviendo el vino en una copa y haciéndolo girar moviendo la copa. Percibir los aromas de un vino es una de las partes más placenteras de la experiencia de tomarlo, y beberlo directamente de la lata no permite que se “abran" sus aromas, por lo que al tomarlo de esta manera nos estaríamos perdiendo de una de las partes más lindas de la experiencia.
Hay que animarse a romper con los prejuicios. Hoy una de las metas fundamentales para todos los que trabajamos en la industria del vino es acercarlo al consumidor, de manera amigable, sin rebusques y sofisticaciones innecesarias. No veo al vino en lata como una amenaza para los vinos en botella, sino como un complemento para hacerlo llegar a consumidores que hoy están eligiendo otras bebidas.
Por Martín Bruno. Miembro de la Asociación Argentina de Sommelier, elegido Mejor Sommelier de Argentina 2017 y brand ambassador de Cafayate Bodegas Etchart.

Fuente: https://www.clarin.com/sociedad/vinos-latas-barriles-opinion-campeon-argentino-sommeliers_0_4olsQz4bp.html

¿Qué sucedió con el primer vino en lata que se produjo en la Argentina?

¿Qué sucedió con el primer vino en lata que se produjo en la Argentina?
Para alentar la venta de vinos y competir con la cerveza, se autorizó la venta de vino en lata. Hubo un antecedente: se llamó Iron Wine.

La industria vitivinícola está tratando de encontrarle la vuelta a un problema que viene de larga data: el consumo viene cayendo todos los años y cada litro que se pierde, no se recupera. 
En paralelo, en los últimos 20 años creció significativamente el consumo de cerveza: a fines de la década del 90 se consumían 40 litros per cápita de vino contra 37 litros de cerveza. 
Sin embargo, esa relación cambió sustancialmente: el año pasado, el consumo anual per cápita de vino bajó a 20 litros y el de la cerveza pasó a más que duplicarlo, con 42 litros.
Frente a este cuadro de situación, el INV dispuso que las bodegas argentinas podrán comercializar vinos para venta directa al público en envases de acero inoxidable, es decir, que se podrán vender en latas, así como en garrafas, formatos utilizados por la industria de la cerveza.
La resolución sostiene que “este tipo de recipiente permite mantener al vino bajo una atmósfera inerte, evitando alteraciones del mismo y conservando las características físico-químicas y organolépticas del producto original”.
En general, las repercusiones frente a esta medida, fueron positivas. Desde la Cámara de Bodegueros de San Juan, por ejemplo, señalaron que puede ser una excelente alternativa para competir en el mercado y dejar de lado los prejuicios de que el vino "sólo se debe beber en copa". 

¿Qué pasó con el primer vino en lata de Argentina?

La realidad es que no es algo nuevo. En 2005, un emprendedor argentino desarrolló la marca Iron Wine y desafió las las costumbres de esta industria al presentar un producto tan innovador como desafiante: el primer vino en lata de producción nacional. 
"La idea se me ocurrió como consumidor. Yo no vengo de la industria del vino, pero siempre me preguntaba por qué no habí­a vino en lata, me parecí­a un formato realmente cómodo", explicaba allá por el año 2008 a este medio Jaime Travers, socio gerente de la empresa Iron Wine.


"Para comenzar y ver si mi idea era viable o era una locura tení­amos que comprobar si técnicamente se podí­a comercializar vino en este formato. Hace 30 años en la Argentina habí­a habido un primer intento, pero como la industria del packaging no estaba tan desarrollada y habí­an usado envases de hojalata, de menor calidad, la vida útil del vino era muy corta y esa prueba no funcionó", comentó. 

Pero una vez que las pruebas con nuevos materiales fueron exitosas, "junté un grupo de inversores para hacer posible el proyecto y en 2005 sacamos las primera latas para vender al exterior", detallaba el emprendedor.
Con un capital inicial de u$s400.000 y luego de tres años de experiencia, Iron Wine llegó a alcanzar una producción de 360.000 latas anuales y llegó a destinar más del 90% a los mercados externos. 
Sus dos variedades y formatos eran un Malbec Cabernet y un Chennin Blanc en latas de 250 cm3 y 350 cm3, envasados por la bodega mendocina Jean Rivier, de San Rafael.
Los tres destinos más importantes de los 20 a los que llegó a exportar fueron España, Holanda y Colombia.
Desde Iron Wine explicaban hace más de una década que si bien "para el consumidor suena rarí­simo que el vino esté en contacto con el metal, hoy es algo común, casi todas las bodegas fermentan vino en tanques de acero inoxidable. Lo que hicimos simplemente fue llevar una técnica usual en la industria a la palma de la mano de los clientes. No es algo que esté reñido con las prácticas de producción"
A nivel técnico, las latas estaban recubiertas por un barniz especial que evitaba que el aluminio transmita sabores extraños al vino.
No fue un camino fácil 
Que en su momento este vino de producción nacional haya sido más fácil de conseguir en Aruba o en Guatemala que en la Argentina respondía a las características del mercado local, en el que costó imponer el formato.
Además, el proyecto debió enfrentar la crisis internacional de 2008 y el comienzo de un proceso inflacionario en el plano local, que llevó a que cayeran fuertemente las órdenes de compra del exterior.
Ante las dificultades para mantener el nivel de exportaciones y los problemas para lograr aceptación en el mercado local, el emprendimiento debió replantearse los próximos pasos.
En un momento, Iron Wine intentó conseguir el apoyo de nuevos inversores, pero la idea no prosperó. Hoy su página web es un dominio que está a la venta.


Fuente: https://www.iprofesional.com/vinos/280176-vinos-vino-malbec-consumo-Que-sucedio-con-el-primer-vino-en-lata-que-se-produjo-en-la-Argentina?fbclid=IwAR2IryKHI4GegJ2DeGQxn3FfEzkUTu1_bJ9zEPPFj7QQnJl10bb3UW1A8M

Publicado en

miércoles, 24 de octubre de 2018

Vino, el mejor antioxidante Según un estudio científico el consumo de vino retrasa el envejecimiento

El consumo moderado de vino, tanto en el hombre como en la mujer, es beneficioso para la salud porque repara los daños producidos por el metabolismo, según un nuevo concepto científico que reclasifica a esa bebida como un alimento con efectos antienvejecimiento y de rejuvenecimiento porque enlentece y repara los daños del organismo.
Ese nuevo concepto científico tiene origen en un estudio sobre consumo de alimentos en 26 países que llevó adelante la OMS en la década del '80 y que mostró a Francia con las cifras más bajas de mortalidad per cápita a pesar de su alto consumo de grasas, y ese resultado fue atribuido a la presencia del vino en la dieta.
"El estrés oxidativo, que es un estado de desbalance por el exceso de radicales libres producidos por el metabolismo y que no se pueden eliminar por el déficit de defensas antioxidante, causa envejecimiento prematuro y está en el origen de las enfermedades como la hipertensión, la diabetes, el cáncer y las neurodegenerativas", explicó Raúl Pastor, médico del Hospital de Clínicas de Buenos Aires.
El profesional, especialista en Seguridad Alimentaria, Consumo, y Nutrición, agregó que "una nueva generación de antioxidantes como el resveratrol, presente en el extracto de las uvas, neutraliza a los radicales libres de manera natural, selectiva y sin efectos secundarios".
"Hoy sabemos que el consumo de vino no sólo es beneficioso para la salud sino que además repara los daños del metabolismo producidos por el estrés oxidativo", resaltó.
Destacó que "incluso, si se compara la cantidad de polifenoles que contienen algunas frutas, verduras y bebidas comunes, el vino es la principal fuente de polifenoles de la dieta y en este sentido vale destacar al vino argentino, que se diferencia por las bondades que posee gracias a los métodos de elaboración y las características que presenta el clima del país, por ejemplo." Junto a otros especialistas internacionales, Pastor participó en Londres del coloquio "Vino y Salud", con el auspicio de la Embajada Argentina en Gran Bretaña, la Academia Argentina de la Vid y el Vino, y Bodegas de Argentina.

¿Cómo es el "vino tirado" que ya se puede disfrutar en Argentina?

Cómo es el "vino tirado" que ya se puede disfrutar en Argentina.

El Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) autorizó el fraccionamiento y comercialización de vino en recipientes de acero inoxidable, que facilitará la venta por copa.
El Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) autorizó el fraccionamiento y comercialización de vino en recipientes de acero inoxidable, que facilitará la venta por copa.
Una resolución oficial  permite que el vino también se pueda comercializar en el canal “on trade” (restaurantes, wine bar, cafés) por copas, a través de tanques como los que se suelen utilizar para la cerveza tirada.
En sus considerandos, la norma señala que “este tipo de recipiente permite mantener al vino bajo una atmósfera inerte, evitando alteraciones del mismo y conservando las características físico-químicas y organolépticas del producto original”.
La resolución habla de tanques (de estilo de los que se usan en la cerveza tirada) y lo que ponen como techo son con capacidad de hasta 50 litros.
En ese sentido, el presidente del INV, Carlos Tizio, dijo que la norma se refiere a “envases de acero inoxidable, hasta 50 litros. Igual a los contenedores o tanquecitos usados para la cerveza”.
Nada dice de permitir también las latas (de menos de 500 cc) como las que se utilizan en muchos mercados del mundo, y el uso de su material que es otro metal, el aluminio, porque aseguran que ya existían antecedentes del uso de estos envases.
Hace más de una década una empresa de la Argentina exportó vinos en lata a diferentes mercados bajo la marca Iron Wine, luego discontinuada, y mucho antes existieron otros antecedentes, ya que en la década del ‘90 el INV había aprobado este tipo de envases, confiaron las fuentes.
Según el INV, si una bodega quiere utilizar este tipo de fraccionamiento, tiene que presentarlo ante el organismo y el producto deberá pasar por análisis de laboratorio hasta su aprobación, antes de ser comercializado.
“Vamos a acompañar a la industria en todas las iniciativas que le permitan la llegada del producto al consumidor, y no poner impedimentos para ello mientras se mantenga la genuinidad del producto”, concluyó Tizio.

martes, 23 de octubre de 2018

En una movida conjunta y "Primaveral" de los Argentina Wine Bloggers decidimos recomendar algunos bellos rosados que pueden acompañar los momentos templados de la estación. Fabián Mitidieri EL blog del vino patagónico.-

martes, 23 de octubre de 2018


#AWBDescorcha #Rosados - 2018

En una movida conjunta y "Primaveral" de los Argentina Wine Bloggers decidimos recomendar algunos bellos rosados que pueden acompañar los momentos templados de la estación.

A continuación les describo algunas originales opciones patagónicas que han pasado por el Blog. 

MANTRA PINOT NOIR ROSÉ 2017

martes, 23 de octubre de 2018


#AWBDescorcha #Rosados - 2018

En una movida conjunta y "Primaveral" de los Argentina Wine Bloggers decidimos recomendar algunos bellos rosados que pueden acompañar los momentos templados de la estación.

A continuación les describo algunas originales opciones patagónicas que han pasado por el Blog. 

MANTRA PINOT NOIR ROSÉ 2017
Bodega: Miras 
Zona: Fernandez Oro - Río Negro
 


Valor: 250 pesos
Calidad/Precio: Buena

Correcto rosado Patagónico que presenta aromas de fruta roja, con toque floral y ruda. En la boca se comporta "vivo" y con buen equilibrio. Cierra con persistencia media.

  

LASKA ROSÉ 2017

Bodega: Familia Pirri 
Zona: Ingeniero Huergo - Río Negro 
 
Valor: 230 pesos

Calidad/Precio: Excelente

lunes, 22 de octubre de 2018

Autorizaron la venta de vino “tirado” en restaurantes.

El Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) autorizó el fraccionamiento y comercialización de vino en recipientes de acero inoxidable, que facilitará la venta por copa.
La Resolución 4, publicada hoy en el Boletín Oficial, permite que el vino también se pueda comercializar en el canal “on trade” (restaurantes, wine bar, cafés) por copas, a través de tanques como los que se suelen utilizar para la cerveza tirada.
En sus considerandos, la norma señala que “este tipo de recipiente permite mantener al vino bajo una atmósfera inerte, evitando alteraciones del mismo y conservando las características físico-químicas y organolépticas del producto original”.
La resolución habla de tanques (de estilo de los que se usan en la cerveza tirada) y lo que ponen como techo son con capacidad de hasta 50 litros, precisaron desde el INV ante una consulta de Télam.
En ese sentido, el presidente del INV, Carlos Tizio, dijo a Télam que la norma se refiere a “envases de acero inoxidable, hasta 50 litros. Igual a los contenedores o tanquecitos usados para la cerveza”.
Nada dice de permitir también las latas (de menos de 500 cc) como las que se utilizan en muchos mercados del mundo, y el uso de su material que es otro metal, el aluminio, porque aseguran que ya existían antecedentes del uso de estos envases.
Hace más de una década una empresa de la Argentina exportó vinos en lata a diferentes mercados bajo la marca Iron Wine, luego discontinuada, y mucho antes existieron otros antecedentes, ya que en la década del ‘90 el INV había aprobado este tipo de envases, confiaron las fuentes.
Según el INV, si una bodega quiere utilizar este tipo de fraccionamiento, tiene que presentarlo ante el organismo y el producto deberá pasar por análisis de laboratorio hasta su aprobación, antes de ser comercializado.
“Vamos a acompañar a la industria en todas las iniciativas que le permitan la llegada del producto al consumidor, y no poner impedimentos para ello mientras se mantenga la genuinidad del producto”, concluyó Tizio.
Publicado en Diario "Río Negro", 22 de octubre de 2018.

domingo, 14 de octubre de 2018

El vino artesanal neuquino conquistó el podio nacional.

Una bodega familiar de Senillosa consiguió excelentes resultados en un concurso para pequeños productores. 
Secretos de una elaboración cien por ciento manual.

Neuquén se ha destacado en los últimos años por albergar a creadores de gran calidad en distintos productos. El vino es parte del listado. Parte de la coronación de este proceso se ve reflejado en la premiación en distintos certámenes donde esta bebida se ponen a prueba ante un jurado de especialistas. Fue lo que ocurrió recientemente con la bodega “Puerta Oeste”, un emprendimiento familiar ubicado en Senillosa, que obtuvo medallas en el 9° Concurso Nacional de Vino Casero y Artesanal de Lavalle, Mendoza.
“Con el Malbec joven obtuvimos un Gran Oro y con el Malbec corte de roble tuvimos Oro. Después conseguimos una mención especial con el Pinot Noir joven 2018 y el vino reserva que se llama Semilla sacó otra mención especial”, contó Viviana Goldstein, una de las dueñas de la bodega que viajó a Mendoza y volvió con cuatro galardones.
Su esposo Julio Penros destacó que fue la única medalla Gran Oro en la categoría artesanales con 97 puntos. “Hace tres años venimos participando en los concursos y el año pasado decidimos no solamente participar en la Patagonia sino indagar en otros lados”, reveló Viviana. Ya estuvieron en otros certámenes donde también recibieron distinciones.
Sobre el día a día contó que se hace todo manual salvo pocas funciones donde emplean un tractor. El tratamiento de los viñedos es orgánico, por lo que están libres de agroquímicos.
Julio se encarga de la poda y precisó que es del tipo Guyot. El sistema de conducción es en espalderas.
La superficie de producción es de dos hectáreas y está compuesta por plantas de entre uno y siete años de edad . “Una vez que se inicia la cosecha, se lleva adelante la fermentación alcohólica y ese es el último de los eslabones, pero en realidad durante todo el año se estuvo llevando adelante el vino en el monte”, dijo Penros.
Cuando comenzaron fueron colmando la superficie a partir de plantas que obtenían de sus propios viñedos y después se fueron completando con otras que compraron en macetas hasta llegar al número de hoy de 3.800 plantas entre variedades de Malbec y Pinot Noir. “Esta todo listo y faltan detalles para que implantemos en 20 días aproximadamente 400 plantas de Cabernet Franc”, anunció.
Algunos de los lugares donde está a la venta el producto es Villa la Angostura, Senillosa, Buenos Aires, Rosario y Bariloche.
La bodega hoy tiene en uso tres barricas americanas. “Esperamos redondear este año las 5.000 botellas entre todos los varietales”, contabilizó Viviana.
Los secretos de Semilla no son pocos. Viviana y Julio marcaron como un “amigo” de la producción el viento. Dicen que favorece en la sanidad de las vides. Entre los enemigos anotan a las aves ( sobre todo las palomas) que son una amenaza para las uvas en maduración.
Los vinos de la Patagonia se mostrarán en Neuquén.
La cuarta edición del Concurso de Vinos de la Patagonia será el 26 de octubre en el Centro Pyme. La modalidad: degustación a ciegas. Participarán bodegas de Chubut, La Pampa, Río Negro y Neuquén.
Busca posicionar los vinos producidos en la región, crear un espacio que propicie el intercambio de opiniones y el encuentro entre todos los actores.
La Patagonia tiene condiciones climáticas adecuadas para el cultivo de la vid, aseguran los especialistas. El listado incluye bajas precipitaciones durante el ciclo productivo, alta heliofanía, días cálidos y noches frescas, y vientos regulares en primavera.
Estas condiciones sumado a los factores productivos de suelo y agua permiten más uvas libre de enfermedades y con muy buena calidad enológica.
La entrega de muestras para el concurso se recepcionarán en Sarmiento 802 (Neuquén) y en Belgrano 632 (Roca) hasta el 16 de octubre.
El certamen es organizado por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Centro Pyme, el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), el Centro de Desarrollo Vitícola Patagonia Norte (CDV), CFPA N°2 y el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV).
“El Malbec joven que ganó una medalla es totalmente frutado, es bien salvaje y expresa en todo su ámbito lo que es la Patagonia”.
Viviana Goldstein, sobre las características del vino que consiguió el premio.
“La decisión nace por la relación que tuvo el vino siempre con la humanidad, como un alimento primario junto a otros como el pan, queso y la miel”. Julio Penros reflexionó sobre los motivos que los llevó a la producción.

En la provincia se elaboraron más de 5,7 millones de botellas.

En la temporada 2017 se elaboraron en la Provincia de Neuquén 5.755.700 litros de vino, apuntó Silvia Gandolfi, coordinadora del Programa Vitivinícola del Centro Pyme.
El establecimiento de Senillosa es uno de los que el Centro Pyme Adeneu asesoró desde su nacimiento. Fue de forma integral en lo que respecta a la plantación, momento oportuno de cosecha y elaboración de vino y fraccionamiento.
Gandolfi explicó que están las bodegas grandes que hacen más de 12 mil litros, y los elaboradores de vinos caseros y artesanales que hacen hasta 12 mil litros.
El programa brinda líneas de financiamiento con bajas tasas de interés y asistencia técnica a elaboradores artesanales “donde algunos son productores de uvas, y otros que compran a otros productores y elaboran el vino”.
Desde el Centro Pyme se acompañan en la provincia alrededor de 50 cultivadores de uva para vino, de uva de mesa, y elaboradores de vino casero y artesanal. Indicó que se sigue todo lo que es la plantación del viñedo hasta el fraccionamiento y venta.
Gandolfi contó que hay una marca conjunta que se llama “Notas de Vino”, que engloba a varios elaboradores de vino casero y artesanal. “Afianza lo que son canales de venta”, señaló.
La Argentina posee unas 895 bodegas elaboradoras, de las cuales 48 se encuentran en la Patagonia, y hay en la región 92 emprendedores dedicados a la elaboración casera y artesanal.
Fuente de información e imagen: Diario "Río Negro", domingo 14 de octubre de 2018.-

domingo, 7 de octubre de 2018

“La calidad y el estilo de López son innegociables”.

“La calidad y el estilo de López son innegociables”.

Omar Panella, enólogo de la mítica y centenaria bodega López, nos explica en esta entrevista el clásico estilo, la vigencia, la forma de hacer vinos, los nuevos proyectos, y las particularidades de la que es sin dudas una de las empresas icónicas de la vitivinicultura, no sólo de Argentina, sino de América.


Bodegas y Viñedos López, ubicada en Maipú, Mendoza, que fue fundada en 1.898, mantiene su particular y afamado estilo desde hace añares, sostenido en la calidad de toda su línea de producción, desde la materia prima, hasta la comercialización, pasando por la vinificación y el añejamiento de sus vinos. Es sin dudas un estilo clásico, pero vigente, particular, excelso…una marca registrada que logró trascender al tiempo y a las generaciones.
DVyV: ¿Cuál es su filosofía y la de López a la hora de idear un vino?
OP: Más allá de las exigencias del mercado, a las que siempre estamos atentos, partimos de dos preceptos muy claros: la Calidad y nuestro Estilo, que son innegociables. Es la filosofía que día a día inculcó José Federico López (hijo del fundador y gran impulsor de nuestros vinos finos) y que se mantiene hasta el día de hoy.
Permanentemente estudiamos y debatimos ideas y propuestas que van surgiendo. Luego, con aquellas de mayor potencial, iniciamos un largo camino de desarrollo: en el mundo del vino nada se logra en poco tiempo. Desde el equipo de enólogos y en conjunto con el Directorio delineamos el nuevo producto para luego avanzar definiéndolo integralmente, desde sus características enológicas hasta su imagen y comunicación. Así surgieron recientemente, por ejemplo, el Chateau Montchenot 1983 y nuestros Champagnes Montchenot Rosé y López Dulce, entre otros.
DVyV: ¿Cómo definiría el auténtico estilo López?
OP: Para explicarlo nos remontamos casi tres décadas atrás. La industria vivió en los ‘90 el comienzo de un cambio muy grande en el estilo de vinos que se producía en Argentina. Los “vinos del nuevo mundo” habían llegado para quedarse.
Bodegas López decidió mantener el método de producción, un estilo clásico basado principalmente en el uso de tonelería grande (toneles y cubas de entre 5 mil y 35 mil litros de capacidad) y no barricas de 220 litros. En ellos la superficie de contacto entre el vino y la madera es menor, por lo que la transferencia de aromas y aportes de la madera también lo es, lo que permite un mayor tiempo de añejamiento.
Procuramos obtener amabilidad en los taninos y redondez plena, lo que hace que el color de nuestros vinos posea tonalidades más claras, producto de ese añejamiento más extenso. También buscamos equilibrio en la madurez de las uvas, para que sus alcoholes ronden los 12,5 - 13 grados. En síntesis: vinos equilibrados, suaves, fáciles de beber.
Como dijimos, nuestro Estilo demanda más tiempo de guarda en tonel para lograr un añejamiento correcto y ese equilibrio justo entre vino y madera, dando prioridad a los descriptores varietales. De modo que hoy estamos comercializando, por ejemplo, del Montchenot 10 años (el clásico), la cosecha 2008. Todos estos factores hacen que el resultado sea un vino de guarda con un sabor particular y fácil de tomar, que expresa mejor todas sus cualidades luego de ser correctamente decantado.
Pero este Estilo no refiere sólo a vinos: Bodegas López ha trabajado desde el inicio en mantener una conducta comercial justa y clara. Mantiene para todos los clientes una lista de precios única, uniforme.
Es el legado que nos dejaron quienes nos antecedieron, mucho trabajo, esfuerzo, aprendizaje y convicción de seguir con nuestro estilo, “El Estilo López”.
DVyV: ¿Vinos varietales o vinos de corte?
Si bien el mercado tradicional se inclinaba por los vinos de corte, como el Federico López o grandes clásicos nuestros como Chateau Vieux y Montchenot, los varietales son una opción para apreciar las virtudes de cada uva. Las preferencias del mercado han fluctuado entre unos y otros, y desde nuestros inicios atendemos estas variaciones ofreciendo productos que acompañan el gusto del consumidor, pero siempre respetuosos de nuestro estilo.
DVyV: ¿Se puede concebir la idea de un vino de guarda sin el paso por roble?
OP: Claro que se puede. Sin ir más lejos, los tintos de nuestra línea Xero no tienen paso por tonel y poseen un potencial de guarda de 5 años o más. Incluso hay tendencias que abrazan esa idea: lograr vinos de alta gama, 100% libres de roble en cualquiera de sus formas.
Es así que nuestra decisión de siempre fue utilizar para el añejamiento grandes toneles, donde el aporte de la madera es mucho más suave, progresivo y menos agresivo que en las barricas, buscando vinos con mayor definición varietal.
No hay dudas de que el paso por madera aporta al vino complejidad. Pero hoy no es condición inexorable para obtener un buen vino de guarda.
DVyV: ¿Hay algún vino en particular de los que elabora que le dé mayor placer hacer?
OP: La pasión que ponemos en el trabajo está presente en cada uno de nuestros productos. Pero hay un vino en particular que posee una emotividad muy fuerte: Federico López tinto Gran Reserva cosecha 2.000.
José Federico López fue el gran impulsor de nuestros vinos finos, y sus hijos, nietos y bisnietos quisieron homenajearlo creando este corte de Cabernet Sauvignon y Merlot. Cada uno dio lo mejor de sí en su elaboración y estamos seguros que estaría muy orgulloso del resultado.
DVyV: ¿Qué es un gran vino?
OP: Mi opinión es que un gran vino es aquel que se convierte en clásico. Puede haber infinidad de modas pasajeras, pero sobrevivir al paso del tiempo, permanecer en el gusto del consumidor por décadas e instalarse en su corazón es algo reservado para muy pocos: esos pocos son, para mí, los que merecen ser considerados “grandes vinos”.
DVyV: ¿Qué fenómenos ocurren dentro de los grandes toneles que utiliza López para añejar sus vinos?
OP: En los toneles se produce un proceso de microoxigenación: esto es un proceso de intercambio de oxígeno a través de los poros de la madera, que permitirá que el vino desarrolle un bouquet particular, con la formación de los conocidos aromas terciarios. Esto contribuye a lograr mayor suavidad y redondez en los vinos.
DVyV: ¿Por qué los vinos de López tienen la particularidad de poder ser guardados en botella por muchos años (casi eternamente)? ¿Se debe a la pregunta anterior?
OP: En gran parte sí. Como reza nuestro lema: “El tiempo y la paciencia dedicados al añejamiento los ponemos nosotros”. Controlar y cuidar cada proceso y dedicar el tiempo necesario al añejamiento, tanto en tonel como en botella, nos permite obtener vinos que pueden transitar muchos años de guarda y entregar su mejor expresión al momento de degustarlos. Este tipo de vinos es necesario decantarlos con suficiente antelación (al menos una hora) para disfrutarlos en su plenitud.
Por Diego Di Giacomo
diego@devinosyvides.com.ar
Sommelier - Miembro de la Asociación Mundial de Periodistas y Escritores de Vinos y Licores.