lunes, 29 de agosto de 2022

Se aprobó el proyecto de ley para declarar a Mainqué “Capital del Pinot Noir”.


 Se aprobó el proyecto de ley para declarar a Mainqué “Capital del Pinot Noir”.

Esta identificación geográfica brindará mayores posibilidades para que la localidad mainquina, como todo el Alto Valle, promuevan e impulsen el enoturismo, el turismo gastronómico y un acompañamiento a las inversiones que se están realizando en dicha localidad.

Mainqué - La legislatura de Río Negro aprobó la semana pasada en primera vuelta, el proyecto de ley que busca declarar a la localidad de Mainqué “Capital Provincial del Pinot Negro (Pinot Noir) por presentarse en esta localidad la mayor producción vitivinícola de la provincia.

Duranta la sesión de la Legislatura la legisladora Marcela Avila (JSRN) actuó de miembro informante y destacó que el pinot noir es una variedad de las más selectas, es uno de los vinos más exclusivos y elegantes a nivel mundial.

La legisladora detalló también que en el país hay aproximadamente dos mil hectáreas implantadas con esta sepa, y están distribuidas entre Mendoza (74%), Neuquén (12%) y Río Negro, que ocupa el tercer lugar con un 7%.

“En Río Negro la cantidad de hectáreas cultivadas son alrededor de 130, y el 80% de ellas están en el Alto Valle, principalmente en la localidad de Mainqué con casi el 50% de esas hectáreas”, resaltó Ávila. Precisamente, Mainqué tiene 47 hectáreas plantadas lo que representa el 46,5% del departamento de General Roca y el 37 % de la provincia, siendo el terruño con más Pinot Negro implantado de la provincia. Además, cuenta actualmente con cuatro bodegas.

Esta identificación geográfica brindará mayores posibilidades para que la localidad mainquina, como todo el Alto Valle, promuevan e impulsen el enoturismo, el turismo gastronómico y un acompañamiento a las inversiones que se están realizando en dicha localidad.

El Pinot Noir es una uva muy delicada y muy sensible a las enfermedades, haciendo que su elaboración sea toda una aventura de riesgo en su producción.

PUBLICADO EN PERIÓDICO LA COMUNA DE VILLA REGINA.

https://lcr.com.ar/todos/se-aprobo-el-proyecto-de-ley-para-declarar-a-mainque-capital-del-pinot-noir-3561/

domingo, 28 de agosto de 2022

Con sello de origen: los últimos distritos aprobados.

En el país fueron reconocidas Vistalba (Mendoza), Balcarce (Buenos Aires) y Victoria (Entre Ríos) como terruños donde surge el vino. Repasamos sus propuestas.

Por Joaquín HIDALGO.

Desde el viernes 26 de Agosto pasado Vistalba es una nueva Indicación Geográfica (IG) en el vino argentino. En pocas palabras, uno de los distritos más famosos en la elaboración de Malbec perteneciente a Luján de Cuyo, Mendoza, con una larga historia en la producción de vinos, es finalmente reconocido como un origen oficial. Desde ahora puede figurar con toda claridad en las etiquetas.

En el últimos año y medio, otras IG’s fueron también aprobadas, en rincones insospechados del país: Balcarce en Provincia de Buenos Aires (2021) y Victoria en Entre Ríos (2021). Con ellas, a la fecha la Argentina tiene 106 orígenes de vino registrados para usar en sus etiquetas, muchas de las cuáles fueron aprobadas de oficio en 2002.

Las nuevas IG’s se inscriben en medio de un proceso largo en el que Argentina y los productores de vino buscan proteger y promover aquellos terruños que ofrecen cualidades distintivas y reconocibles para sus vinos. Es, para decirlo llanamente, darle un estatus especial, tanto para que ganen distinción en las etiquetas como para protegerlas de usos indebidos. Desde 2002 en que se reconocieron de hecho las primeras IG’s, a la fecha, algunas fueron muy discutidas, otras aprobadas sin más y un puñado incluso siguen en disputa. En todo caso, una cosa es segura: en la medida en que los vinos tienen un sabor atribuible a un lugar determinado es importante darle validez. Eso es exactamente lo que está sucediendo.

La esperada Vistalba.

El caso de la flamante IG Vistalba es ilustrativo del valor que supone una Indicación Geográfica. Vistalba es un distrito político de Luján de Cuyo, Mendoza, donde a lo largo del siglo XIX y XX se establecieron algunos de los viñedos más prestigiosos de Malbec y Cabernet. En el pasadso, el lugar específico del que proviniera un vinonera menos importante y a ninguna bodega se le ocurrió regístralo como marca.

Sin embargo, en 2003 se lanzó la bodega Vistalba, quienes registraron a su vez la marca comercial. En los años que siguieron, muchos de los viñedos ubicados en ese rincón alto, con suelos aluviales de Luján, no podía tener otra identificación que los genéricos Luján de Cuyo o Mendoza.

Sin embargo, fue la propia Bodega Vistalba la que decidió inscribir su marca como IG y liberarla para el uso común. El trámite se inició en mayo de este año y desde el 26 de agosto pasado se convirtió en una denominativo que compartirán los viñedos que aún quedan en la zona. Los Malbec son particularmente vistoso en Vistalba: maduros y con buen cuerpo, taninos voluminosos y finos, ofrecen una nota de ciruela y pimienta blanca.

El dato final es que, ahora que la Denominación de Origen Luján de Cuyo se relanza al mercado, Vistalba es finalmente un distrito que los productores pueden usar. En el corto plazo veremos Malbec Vistalba en las etiquetas.

Balcarce.

Distinto es el caso de esta IG ubicada en el corazón de la provincia de Buenos Aires. Tramitada por la bodega Puerta del Abra, enclavada en las serranías del sistema de Tandilia, desde 2013 cultivan unas 12 hectáreas plantadas, entre otras variedades, Pinot Noir, Chardonnay, Alabriño y Riesling. Vinos que embotellan y comercializan a cuentagotas. Los blancos son muy interesantes.

Como no es una zona en donde nadie hubiese operado uvas antes, pero la marca Balcarce ya estaba registrada en otros rubros, desde un comienzo decidieron establecerla como una Indicación Geográfica. La IG fue reconocida en Marzo de este año.

Victoria, Entre Ríos.

El año pasado fue aprobada Victoria, Entre Ríos. Por raro que parezca a los ojos de hoy, Entre Ríos fue una zona vitícola de relativa importancia hasta 1930 en que se prohibió la plantación de vides fuera de las áreas del oeste. Así, la provincia languideció como una zona vitícola. Hasta que, derogada la prohibición, algunos productores volvieron a la elaboración de vinos. Así, en 2021 la bodega Borderío solicitó la inscripción de la IG.

Promulgada en mayo del año pasado, protege finalmente todo el departamento de Victoria en la provincia de Entre Río, donde está ubicada la bodega. Los vinos tintos, con Malbec, Syrah y Merlot a la cabeza, son vinos potentes e sabrosos.

DoluptaLas IG definen un área geográfica donde se produce vid cuyo sabor está indisociablemente vinculado a la geografía del lugar. Las IG son el paso previo a las Denominaciones de Origen (DOC), que combina las condiciones propias de un origen con las de un estilo determinado, que se somete a un comité que juzga la cualidad o pertinencia de un tipo de vino a lo que dicta la norma.

PUBLICADO EN DIARIO LA MAÑANA DEL NEUQUÉN.

Domingo 28 de agosto del 2022.

https://www.lmneuquen.com/con-sello-origen-los-ultimos-distritos-aprobados-n941887

jueves, 18 de agosto de 2022

20 PINOT NOIR ARGENTINOS PARA CELEBRAR A LA CEPA MÁS REFINADA.

 El Día del Pinot Noir es ocasión ideal para conocer más a fondo a estos vinos, que suelen ser de los más exclusivos del planeta. Por suerte Argentina ofrece algunos ejemplares para quedarse sin aliento, y aquí te contamos cuáles.

En el Día del Pinot Noir, celebramos a aquella cepa que, como pocas, desafía la habilidad de los winemakers. Esta tinta, oriunda de la Borgoña y con fama de caprichosa, es exigente en primer lugar de un terruño donde sentirse a gusto. Sin esto, es imposible lograr un resultado de calidad. Podemos decir que le gustan los climas fríos, nublados si es posible, así como también los suelos pobres, y si son rocosos y calcáreos mucho mejor.

Pero no solo es eso lo que va a exigir a quienes quieran elaborarla: también demanda atención. “Nunca deja de desafiarnos”, recuerda Roy Urvieta, responsable de los vinos de Domaine Nico, proyecto especializado en Pinot Noir liderado por Laura Catena.

“Es una cepa que no te perdona las distracciones, y por eso hay que estar atento a los suelos, las labores en viñedo, los momentos de cosecha, el roble que usás y cómo. El Pinot Noir delata cada elección que tomás”, advierte.

Por todo lo que resume Urvieta es que en Argentina la aparición de excelentes Pinot Noir se hizo esperar. Mientras todos estaban enfocados en el Malbec, eran pocos los que creían posible elaborar un Pinot Noir de clase mundial en el país. Por suerte, estos pocos nunca bajaron los brazos.

Día del Pinot Noir: de la Patagonia a los Valles Calchaquíes.

Para dar comienzo al Día del Pinot Noir en Argentina es necesario recordar la irrupción de Bodega Chacra en el ámbito local de la mano de Piero Incissa de la Rochetta. Este toscano, de linaje vitícola, se envalentonó con elaborar Pinot Noir en la Patagonia luego de probar una de las botellas de la familia Canale en su bodega de Río Negro.

Desde que pisó suelo argentino, no se detuvo hasta dar con una viña vieja y fue así que encontró en Mainqué un viñedo de 1932 que tuvo que recuperar para elaborar sus primeros vinos. Luego adquirió otro de 1955 y desde entonces sus Pinot son una referencia local reconocida internacionalmente.

A partir de esto, algunos asumieron el desafío de elaborar Pinot Noir de alta gama en diferentes rincones del país. Mientras que en Patagonia la cuna para esta cepa es Río Negro, en San Patricio del Chañar (Neuquén) también le han puesto foco con un estilo más moderno, mientras que en Chubut apuestan por los climas más fríos de la vitivinicultura argentina para lograrlo.

En Mendoza, los viñedos de Pinot Noir migraron a la altura del Valle de Uco durante los últimos quince años. Allí el clima es, sin dudas, más indicado para la cepa, principalmente en Gualtallary, San Pablo y Pampa El Cepillo. Estas tres IGs hoy se reparten las mejores referencias y merecen su mención en este Dia del Pinot Noir.

En San Juan, el Valle de Pedernal ya se posiciona como un spot posible para esta uva: cuenta con clima frío y suelos pedregosos muy interesantes para explorar.

Un origen curioso para el Pinot Noir, aunque por el momento para un solo productor, son los Valles Calchaquíes. Aquí Bodega Colomé lo cultiva a 3111 metros de altura en Payogasta, con muy buenos resultados.

Por último, en la provincia de Buenos Aires hay algunos Pinot Noir que vale la pena seguir de cerca. Por ejemplo, en Chapadmalal se lo cultiva a unos 11 kilómetros del mar, mientras que en Balcarce los viñedos se ubican sobre suelos calcáreos de la sierra de Tandilia.

Los 20 mejores Pinot Noir argentinos elegidos por Vinómanos.

Desde todas estas regiones te vamos a recomendar cuáles son las etiquetas capaces de emocionar al borgoñón más fundamentalista en el Dia del Pinot Noir.

  1. 96pts, Chacra Sin Azufre Pinot Noir 2020
  2. 95pts, Domaine Nico Historie D’A Pinot Noir 2020
  3. 94pts, Pintom SUR Pinot Noir 2019</a>
  4. 94pts, Lunita Pinot Noir 2021
  5. 94pts, Bodega Noemía Pinot Noir 2019
  6. 93pts, Otronia Pinot Noir Block I 2019
  7. 93pts, Salentein Single Vineyard Los Jabalíes Pinot Noir 2019
  8. 93pts, Bemberg Estate La Linterna Pinot Noir 2018
  9. 93pts, Zorzal Porfiado III Corte (8 cosechas)
  10. 93pts, Riccitelli Old Vines from Patagonia Pinot Noir 2020
  11. 92pts, Colomé Altura Máxima Pinot Noir 2020
  12. 92pts, Costa & Pampa Pinot Noir 2019
  13. 92pts, La Freneza Pinot Noir 2020
  14. 92pts, Demencial Pinot Noir Valle de Pedernal 2019
  15. 91pts, Humberto Canale Old Vineyard Pinot Noir 2020
  16. 91pts, Luigi Bosca Pinot Noir 2021
  17. 91pts, Insólito Pinot Noir 2020
  18. 91pts, Contracorriente Pinot Noir 2019
  19. 91pts, Rara Avis Pinto Noir 2020
  20. 90pts, Saurus Select Pinot Noir 2020.
PUBLICADO EN VINÓMANOS.

miércoles, 17 de agosto de 2022

Bodega “La Leonesa” de Basilio García / Bodega y Viñedos Suc. JUAN ALBA.

 


Bodega “La Leonesa” de Basilio García / Bodega y Viñedos Suc. JUAN ALBA.

Basilio García (1860 – 1944), conocido por sus vecinos como “Don Basilio el de León”, fue un inmigrante español que llegó a estas tierras del Alto Valle del Río Negro y Neuquén hacia la agonía de la última década del siglo XIX, instalándose en la antigua Clnia. Fuerte Gral. Roca, hoy paraje Clmte. Martín Guerrico.
La rudimentaria economía agraria de subsistencia de su tierra peninsular y su carácter de aventurero, impulsaron a este profesor universitario de Lengua y Literatura cuando contaba con 23 años a encarar nuevos horizontes, en los que buscaba satisfacer las expectativas que se había impuesto.
Antes de llegar a Allen don Basilio trabajó en la sastrería del español Manuel Álvarez en Buenos Aires, luego fue profesor de los hijos del multihacendado Pedro Luro y administrador de una estancia de Fernández Sotera. Hacia el último decenio del siglo XIX se radicó en Picún Leufú, provincia del Neuquén, siendo administrador de la Estancia Cabo Alarcón y propietario de un negocio de ramos generales. Fueron los hermanos Nicanor y Domingo Fernández Alonso quienes lo entusiasmaron con las tierras vírgenes que estaban vendiendo en la denominada Clnia. Gral. Roca.
Este hombre de gran vivacidad intelectual, sin fatigar su ánimo trabajó duro, durísimo, para convertir esa tierra en bruto del erial patagónico en una finca cuyos principales cultivos implantados fueron la alfalfa y la vid.
Este aguerrido e infatigable leonés iniciaba la jornada cuando el sol tardaría aún muchas horas en levantarse, en esa tranquila oscuridad todas las estrellas estaban cerca, muy cerca de la tierra y brillaban centelleantes.
Según consta en el libro “LE NIL ARGENTIN” de J. A. Doleris, en el año 1910 tenía un pequeño viñedo de una hectárea y media de las variedades Semillón, Malbec y Mollar, más un vivero de 30.000 estacas.
Una vez que las vides produjeron sus primeros racimos, erigió la bodega en la misma chacra; la cual, tenía una capacidad de 250.000 litros de vino, equivalente a 1250 bordelesas –medida que se utilizaba en la época–. Esta bodega ya se encontraba elaborando vinos en el año 1915. Tiempo después, se asoció con el enólogo don Amadeo Biló.
Hacia mediados de la década del ‘40 don Juan Alba, casado con Trinidad García –hija de don Basilio García– se instaló en la chacra de su suegro en Clmte. Guerrico y prosiguió con la actividad bodeguera familiar. Él, de soltero, había trabajado como tonelero en la bodega de la Cooperativa Valle Fértil Ltda. en Gral. Roca.
Sobre el manejo del cultivo de la vid don Juan había aprendido de su suegro don Basilio García, que: “Viña muy pamposa, poco racimosa”. Aforismo que rápidamente nos permite interpretar que un excesivo vigor vegetativo de sus pámpanos conspira contra una buena producción de uva, en cantidad y calidad. El viticultor afirmaría coloquialmente que la cepa se va en vicio.
Elaboraba vinos de mesa blancos y tintos que fraccionaba en bordelesas y eran comercializados con la marca “ALBAGAR” (surgida del apellido Alba y la contracción del apellido García).
Conforme a la Guía del Territorio Nacional de Río Negro, Años 1951 – 52, esta bodega se halla registrada como existente a esa fecha.

Afiches de bordelesas de vino de la Patagonia Norte 
Federico Witkowski. 

Afiches de bordelesas de vino de la Patagonia Norte
 
Federico Witkowski 

martes, 16 de agosto de 2022

Bodega y Viñedos de Manuel Saiz.

 


Bodega y Viñedos de Manuel Saiz.

Esta bodega localizada a la vera de la Ruta Nacional 22 en la zona rural del ejido municipal de Mainqué, perteneció a Francisco y Juan Verdecchia, cuya primera parte fue inaugurada en el año 1920; luego quedó en manos de Juan y a su deceso se hicieron cargo sus hijos Adolfo, Mario, Emilia y Adina Verdecchia y Gregori.
Entre los años 1940 y 1945 don “Manolo” Saiz (1917 – 2012) alquiló sus instalaciones a Enrique Verdecchia, dejando al frente de la misma a su hermano Adolfo (“Fito”); luego de concluido el contrato de alquiler, efectuó una oferta para su adquisición pero no arribaron a un acuerdo. Después de 16 años de espera, en el año 1961, don Manolo Saiz logró que la familia Verdecchia le vendiera la bodega. En ese momento, la misma contaba con una capacidad de 537.445 litros. Fue registrada en el Instituto Nacional de Vitivinicultura bajo el N° N 71471.
Así, a partir del año 1962, don Manolo reinicia su actividad bodeguera y bajo el sangriento sol poniente del preludio primaveral, escanció con legítimo orgullo, cuán abundante y virginal rocío, su propio licor de Baco.
Asimismo, en los años venideros fue ampliando las instalaciones de la misma hasta alcanzar una capacidad total de vasija vinaria de 931.200 litros. Contaba con una superficie de 20 hectáreas de viñedos propios.
Elaboraba vinos de mesa tipo blanco, rosado, clarete y tinto, que al principio fraccionaba en bordelesas y, luego, en damajuanas de 5 y 10 litros y en botellas de 930 y 950 cm3. Vinos que eran comercializados,principalmente en Neuquén y zona del Alto Valle, con la marca Saiz.
Es dable resaltar que don “Manolo” fue una persona que vivió su larga existencia de forma plena e intensa, dinámico, audaz y de mentalidad emprendedora, lo que le permitió tener una nutrida actividad en el rubro comercial –fundó uno de los comercios más importantes de Gral. Roca en la década de 1950: Saiz, López & Baraldi–. Además, su espíritu solidario le ha permitido desplegar un fuerte compromiso en diversas actividades sociales, entre las que se han destacado: su participación durante 50 años en el Rotary Club, ha sido integrante del Directorio del Banco de Río Negro y Neuquén entre 1955 – 1960, fue vicepresidente del Cuerpo de Bomberos Voluntarios, ocupó el cargo de presidente de la Cámara de Agricultura, Industria y Comercio de Río Negro y Neuquén con sede en Gral. Roca entre los años 1953 – 1958 y durante largos años dirigió el Centro de Bodegueros de Río Negro.
Casado en el año 1940 con Alcira Puicerverg, tuvieron 3 hijas: Mirta, Mabel y Silvia.
Su última cosecha la molió en el año 2000 ya con 84 años en el haber de su vida, y en el año 2004 les vende la propiedad vitivinícola a Ángela E. Luppino y Ángela Sue Kamada.
Afiches de bordelesas de vino de la Patagonia Norte 
Federico Witkowski. 

Afiches de bordelesas de vino de la Patagonia Norte
 
Federico Witkowski


jueves, 4 de agosto de 2022

Bonarda, la cepa que pasó de ser usada para vinos comunes a protagonista de vinos de calidad.

 


Bonarda, la cepa que pasó de ser usada para vinos comunes a protagonista de vinos de calidad.

Una variedad que no existe en Europa y que otorga una ventaja a la producción argentina. El vino que se elabora con esta cepa es un producto que sólo se hace en nuestro país por lo que es importante aprovechar ese potencial en los mercados globales.


Bonarda, la segunda variedad tinta plantada en la Argentina después del Malbec y durante mucho tiempo utilizada como base de vinos tintos comunes por sus altos rendimientos y su aporte de color, celebra en la actualidad su aptitud para mejorar vinos de corte y como varietal en vinos de calidad.

Del 1 al 7 de agosto, por segundo año consecutivo, se celebrará la Semana del Bonarda, iniciativa del Fondo Vitivinícola que reúne a bodegas y diferentes actores del sector con el objetivo de promocionar esta variedad con actividades en todo el país.

Según el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV), en base a datos de 2020, con 18.153 hectáreas cultivadas (8,5% del total de vid del país), el varietal está presente en la mayoría de las provincias vitivinícolas de la Argentina.

Con unas 15.162 hectáreas (83,5%), la provincia de Mendoza tiene la mayor cantidad de vides de la cepa del país; seguida por San Juan, con 2.210 hectáreas (12,2%); y el resto de las provincias, con 781 hectáreas (4,3%).

En producción, con 2.123.369 quintales, la Bonarda representó 10,3% de la cosecha total en la vendimia 2020, sólo por detrás del Malbec y la variedad Cereza (perteneciente a los cepajes llamados criollos).

Entre los 5.071.538 hectolitros de vinos comercializados en 2020, 4,9% correspondió a Bonarda (166.288 hl en corte con alguna otra variedad y 79.782 hl de vino varietal puro), con incrementos significativos en las ventas en los últimos años.


Su llegada al país.



Llegada al país con las corrientes inmigratorias de fines del siglo XIX e iniciado su cultivo en la región de Cuyo, esta variedad fue utilizada durante mucho tiempo como base de vinos tintos comunes por sus altos rendimientos por hectárea y su importante aporte de color; y para mejorar vinos de corte, especialmente con Malbec.

«Antiguamente este varietal era de consumo masivo o se usaba para cortes; últimamente ha ganado un prestigio importante y debemos trabajar fuertemente para fomentar la presencia de las botellas de Bonarda en los restaurantes», afirmó en ese sentido el intendente del departamento mendocino Gral. San Martín, Raúl Rufeil.

Ante el descubrimiento de su potencial enológico, se redujo la producción por hectárea, logrando una mejora de calidad, por lo que comienza su desarrollo como varietal del cual se elaboran vinos de alta calidad, explicó el INV en su último informe sobre la cepa.

En ese sentido, el enólogo de Algodón Wines Mauro Nosenzo aseguró a Télam que «es una variedad de gran potencialidad enológica en Argentina y, aunque nunca va a reemplazar al Malbec, es importante para blends, muy noble y manejable, la que más se adapta a hacer mezclas o cortes para vinos premium, e incluso como varietal».

«Antiguamente este varietal era de consumo masivo o se usaba para cortes; últimamente ha ganado un prestigio importante y debemos trabajar fuertemente para fomentar la presencia de las botellas de Bonarda en los restaurantes».

Raúl Rufeil, intendente del departamento mendocino Gral. San Martín.

Por su parte, el enólogo Jorge Rubio, de la bodega homónima, consideró que «a los productores les gusta porque es una variedad muy vigorosa que rinde muchos kilos por hectárea; aunque, cuando reducís el rendimiento de la planta, conseguís muy buena calidad».

«La Bonarda en Argentina siempre se usó para corte, porque daba buen rendimiento, sobre todo en el este, en San Martín y Santa Rosa; hoy hemos logrado una Bonarda ultra premium en Agrelo, en un terroir distinto, con otra altura, otro microclima y también otro manejo de finca, con mucho menos rendimiento pero mayor calidad», afirmó Soledad Buenanueva, enóloga de Dante Robino.


Variedad argentina con mucho potencial.



Esta uva de vino tinto italiana, ancestro de la variedad francesa «Corbeau de Savoie», hoy es más abundante en la Argentina; y en 2011 el INV aceptó el nombre de Bonarda Argentina para referirse a esta variedad cultivada en el país.

Por ello, Nosenzo consideró «importante tenerla en vidriera porque se trata de una variedad argentina y con excelentes resultados».

«Es una variedad que no existe en Europa y eso nos da una ventaja, es un vino que se elabora sólo en nuestro país lo que es importante en los mercados globales», explicó Rubio a Télam.

«Se logró elaborar una Bonarda de alta calidad y hoy no queremos que eso quede acá sino llegar cada vez más lejos», añadió Buenanueva, en declaraciones a Télam.

«A los productores les gusta porque es una variedad muy vigorosa que rinde muchos kilos por hectárea; aunque, cuando reducís el rendimiento de la planta, conseguís muy buena calidad».

Enólogo Jorge Rubio.

Indicaron que hay un alza en las exportaciones de vino Bonarda (puro y con cortes), y citan que en el año 2020 se exportó el mayor volumen de toda la década al alcanzar un total de 56.000 hl, por un valor FOB de US$ 8,97 millones.

El principal destino de los vinos varietales puros en 2020 fue Canadá, seguido por Rusia.

Luego figuran Brasil, Francia y Estados Unidos; y para el Bonarda con cortes los principales destinatarios fueron: Irlanda, Reino Unido, República Checa, Paraguay y Bélgica.

Por Carlos Joseph / Télam.

PUBLICADO EN DIARIO RÍO NEGRO.

https://www.rionegro.com.ar/gastronomia/bonarda-la-cepa-que-paso-de-ser-usada-para-vinos-comunes-a-protagonista-de-vinos-de-calidad-2424205/

miércoles, 3 de agosto de 2022

Cooperativa de Conservas Alimenticias “CERVANTES” Ltda.

 

En Cervantes, en el año 1946 se funda la Cooperativa de Conservas Alimenticias “CERVANTES” Ltda., habiendo sido elegido Presidente del Consejo de Administración don Bernardo Riskin, acompañado entre otros por los productores: Enrique Palmieri, S. Zamboni, Domingo Palmero, Alfredo Lerman, Enrique De Grossi, Ángel Barda, H. González, José Melani y Francisco Lercari.
Visionarios inmigrantes europeos procedentes de distintas corrientes: españoles, italianos y rusos judíos, que ante la ausencia de horizontes al no tener esperanzas de mejorar sus condiciones de vida en sus países de origen, tomaron la decisión de venir a América. Argentina era perspectiva de éxito, era porvenir, era ilusión, era destino.
Gentes que poseían en su ADN comportamientos solidarios, lo que les permitió constituir uniones sólidas para luchar contra idénticos problemas y buscar una misma solución, pero básicamente lo que prevaleció ha sido la confianza entre sí de esos pioneros. Quienes a la postre fueron los verdaderos impulsores del desarrollo y crecimiento económico de la comunidad cervantina.
Un grupo de colonos para quienes la adversidad ha sido la mejor escuela de vida, transformándose en habitantes de la esperanza; así, han comprobado que nunca la noche es tan oscura como justo antes del amanecer y sin desmayar su ánimo trabajaban hasta la hora en que se incendiaba el sol atrás de las bardas.
En el año 1965 anexan a sus instalaciones la construcción de una bodega con una capacidad total de vasija vinaria de 2.137.200 litros. Bodega que quedó registrada en el Instituto Nacional de Vitivinicultura bajo el N° N 70505.
Han elaborado y fraccionado vinos de mesa tipo blanco, rosado, clarete y tinto que expendían con la única marca CURUMAY.
Desde temprano estas entidades de esfuerzo propio y ayuda mutua mostraron en la región patagónica su faz de adelanto y concepto de progreso, consolidada por la participación de un estimable número de viticultores primarios que representaron históricamente una oferta atomizada y sin capacidad negociadora. Esta importancia del sistema de productores cooperativizados se vio reflejada en el alto grado de participación –40 %– que adquirió el mismo en la producción vitivinícola regional.
Afiches de bordelesas de vino de la Patagonia Norte 
Federico Witkowski. 

Afiches de bordelesas de vino de la Patagonia Norte
 
Federico Witkowski

martes, 2 de agosto de 2022

APUNTES MALBEC ORGÁNICO 2021, EL PRIMER EJEMPLAR DE UNA NUEVA COLECCIÓN DE VINOS ÚNICOS DE LUIGI BOSCA.

La bodega de la familia Arizu presentó APUNTES, una nueva familia de vinos de edición limitada y exclusiva para su tienda online.

La colección APUNTES de Luigi Bosca está inspirada en las anotaciones que el ingeniero Alberto Arizu ha registrado en sus cuadernos y que surgen de sus recorridos por los viñedos del mundo, sus conversaciones con las personas que han trabajado con él en las fincas y sus momentos de reflexión. Así, esta línea honra y rinde homenaje a esos saberes de una vida junto a las vides, como si se tratara de una bitácora de sus viajes.

“Después de más de 120 años de conocer íntimamente el terruño mendocino, podemos decir que tenemos un patrimonio genético único, que solo se logra a partir del respeto, la investigación, la experiencia y el conocimiento íntimo de cada finca, cada lote y cada planta”, expresó Arizu. “El hilo conductor que nos vincula con los viñedos es invisible, inagotable, rico e infinito”, agregó.

APUNTES es una colección de hallazgos únicos. Esta línea busca reflejar el espíritu pionero que caracteriza a la bodega y materializa los secretos singulares que emergen de una conversación íntima con la naturaleza.

Apuntes Malbec Orgánico: vinos que emocionan.

“Los vinos de esta colección son vinificados de una manera muy cuidada, buscando expresar con pureza y precisión la esencia del terruño del Valle de Uco. Nos inspiramos en crear vinos únicos y distintivos, pero sobre todo en lograr ejemplares que nos emocionan”, señaló Pablo Cúneo, Director de Enología de Bodega Luigi Bosca.

El primer ejemplar de la colección en salir a la venta, Apuntes Malbec Orgánico 2021 es, a su vez, el primer vino de la bodega que ha sido certificado orgánico. “Desde hace años, hemos asumido un fuerte compromiso con las prácticas sustentables y logramos certificar muchos de nuestros procesos. Hoy también iniciamos el camino hacia la producción orgánica con el objetivo de certificar pronto todos nuestros viñedos”, comentó Alberto Arizu (h.).

El experto anunció: “Tenemos la premisa de ser líderes en vitivinicultura sustentable, porque somos custodios circunstanciales de un patrimonio natural que debemos atesorar para las próximas generaciones”.

Este nuevo vino es originario de viñedos de 20 años de edad situados en El Peral, Tupungato. En ese sentido, Cúneo destacó: “Esta región es una de las más frías del Valle de Uco y genera un vino que nace de una vendimia particularmente fresca, con un interesante carácter frutal, tenso y expresivo. Para este caso, al tratarse de un vino orgánico asumimos además la premisa de cosechar las uvas temprano y así lograr una graduación alcohólica que nos permita llevar adelante una fermentación lo más naturalmente posible. Una fracción del vino luego maduró en barricas de segundo y tercer uso para no quitarle protagonismo a la fruta roja, el perfil floral y el carácter jugoso que nos brinda El Peral. Es un vino sabroso, pero a la vez fácil de beber”, compartió.

Apuntes Malbec Orgánico 2021 corresponde a una partida de solo 6.660 botellas que solo podrán adquirirse a través de la tienda online de Luigi Bosca. El precio sugerido por botella es de $6.172.

Publicado en VINÓMANOS.

Imagen: VINÓMANOS.

https://vinomanos.com/2022/07/apuntes/