domingo, 28 de mayo de 2023

Aporte a productores vitivinícolas beneficia a rionegrinos.


NOTICIAS.

Aporte a productores vitivinícolas beneficia a rionegrinos.

El Ministerio de Desarrollo Social de la Nación destinará $500 millones para asistir a unos 4.000 productores vitivinícolas familiares de hasta 10 hectáreas que hayan sufrido pérdidas por contingencias climáticas. Así lo informó este viernes la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar). Río Negro está entre las provincias beneficiadas.

El dinero será administrado por la Coviar a través de los Centros de Desarrollo Vitícola (CDV) en alianza con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) a nivel país. El Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) será el encargado de controlar la supervisar los viñedos afectados.

Los productores beneficiados deberán trabajar bajo una estructura familiar en Mendoza, San Juan, La Rioja, Salta, Rio Negro y Neuquén; y que hayan sufrido pérdidas por contingencias climáticas y se encuentren en situación de vulnerabilidad social. La ayuda se entregará como Aportes No Reembolsables (ANR) de entre $80 mil y $160 mil, dependiendo del daño sufrido y la cantidad de hectáreas afectadas.

El dinero deberá ser destinado a cubrir el costo de las tareas de poda y fertilización, asegurando su cumplimiento mediante la asistencia técnica y el seguimiento de los técnicos de la Coviar y el INTA, a través de los CDV de las distintas zonas vitivinícolas del país. Para un productor que llegue al monto máximo de $160 mil de beneficio, este aporte le permitirá solventar los gastos de cinco hectáreas de su viñedo, logrando de esta forma recomponer su estructura productiva afectada por las contingencias climáticas sufridas, estimó la entidad público-privada.

Con la presencia de la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, el presidente del INV, Martín Hinojosa, y el presidente de la Coviar, Mario González, se realizó en la Enoteca de Mendoza la firma del convenio de cooperación para la entrega de aportes no reembolsables. «Queremos llegar directamente al pequeño productor y nos proponemos seguir trabajando con Coviar para llevar asistencia y apoyo a todos los viticultores; porque si un productor abandona la actividad, Argentina pierde capacidad productiva», afirmó Tolosa Paz.

Según Tolosa Paz, «el desarrollo social es aquel que potencia la generación de trabajo y que fortalece las capacidades de nuestra comunidad productiva». «Queremos que la vitivinicultura argentina no se detenga porque es fundamental en la generación de riqueza y de divisas, y además fomenta el empleo y el arraigo en muchas provincias del país», completó la ministra.

«Para el sector primario, que ha sufrido mucho este año las duras heladas y el granizo, esta ayuda es un aliciente muy importante», agregó González, quien destacó el rol estratégico que tendrán los CDV. Por su parte, Hinojosa afirmó: «La realidad de la cosecha 2023 nos compromete, hoy más que nunca, a estar cerca y acompañando a todos los productores argentinos. Los productores son el motor del desarrollo económico». Frente a las contingencias climáticas es que muchos productores se vieron fuertemente afectados, colocándolos en condición de vulnerabilidad al restringirse sus ingresos. Por ello, completó Hinojosa, «entendemos la importancia de generar acciones conjuntas para los pequeños productores».

Noticia publicada en ADN RÍO NEGRO.

https://www.adnrionegro.com.ar/2023/05/aporte-a-productores-vitivinicolas-beneficia-a-rionegrinos/

viernes, 26 de mayo de 2023

Viñedos del Utópico. Carmen de Patagones – Buenos Aires.

 

ÚNICO PETIT VERDOT ELABORADO EN LA PATAGONIA ARGENTINA .
EDICIÓN LIMITADÍSIMA .
SOLO PARA CONCURSOS Y PALADARES INQUIETOS .
SU FRACCIONAMIENTO SE REALIZA EN MINIBOTELLAS DE 250 ML DADO SU COSTO Y SU RAREZA DE CORRECTA MADURACIÓN EN ESTAS LATITUDES .

martes, 5 de mayo de 2020.

Reseña de este emprendimiento
efectuada por Fabián Mitidieri.
Vides luego de la poda y con malla antipájaros

En la ciudad de Carmen de Patagones, provincia de Buenos Aires, el Ing. Leonardo Pérez (acá)  se propuso producir una escasa cantidad de vinos naturales, concebidos para el consumo personal y la venta didáctica a los curiosos cazadores de rarezas enológicas. 

Estos "utópicos viñedos" se componen de 220 plantas de las variedades: malbec, cabernet sauvignon, syrah, petit verdot, merlot, pinot noir, sauvignon blanc, chardonnay y torrontés. Las vides fueron adquiridas en el vivero Mercier de Lujan de Cuyo y son de calidad certificada. Todo el trabajo del suelo, la plantación y conducción del viñedo fue realizado personalmente por Leonardo, que también realiza las tareas  de mantenimiento anual del viñedo y la instalación de las mallas antipájaro. También es el responsable de toda la vinificación de los diferentes vinos que elabora.

Particularmente la cosecha 2020 no fue completa, se realizó un estricta selección de racimos de cada varietal por razones de tiempo y dinero. 

Como casi todos los años se realizaron varias cofermentaciones y experimentaciones. Logrando finalmente unos 113 litros finales.

Todo el vino es elaborado manualmente y sin maquinaria. Desde la molienda y el descobillado, hasta el leve prensado es manual. La fermentación se realiza a temperatura controlada en pequeños tanques y con levaduras francesas seleccionadas.

Finalizada la fermentación se separa el vino de sus hollejos sin prensado de los mismos, utilizando únicamente el vino de gota. A posterior se deja en tanques especiales para la fermentación maloláctica durante 40 días, para finalmente traspasar el vino a damajuanas de 5 litros y dejarlo en reposo.

La idea es probar diferentes tipos de vinificación y cofermentaciones para lograr vinos que primero le gusten a su hacedor y luego, si queda algún remanente, puedan ser compartidos con personas curiosas y dispuestas a probar vinos naturales. 

* Esta publicación es del 2020, año infausto de la porquería del coronavirus, pertenece a Fabián Mitidieri al igual que las imágenes de este emprendimiento que había quedado -como se dice- "traspapelada" que se difunde para conocimiento de lectores de CEPAS ARGENTINAS.
Gran trabajo de Fabián Mitidieri que difunde la vitinícultura sureña. Un sabedor de vinos patagónicos argentinos.

UTOPICO Trivarietal 2021.

En la ciudad de Carmen de Patagones, provincia de Buenos Aires, el Ing. Leonardo Pérez (acá) produce una escasa cantidad de vinos naturales, concebidos para el consumo personal y la venta selectiva a curiosos enófilos.


El Blend está compuesto por Cabernet, Merlot y Malbec, para mejor detalle el Merlot fue cosechado el 24 de marzo con 14° de alcohol, el Cabernet el 3 de abril con 14° de alcohol y el Malbec el 2 de abril con 13° de alcohol. La fermentación alcohólica se hizo por separado con levaduras seleccionadas durante 14 días a 28 °C. Finalizada la fermentación alcohólica se combinaron en proporción de 50% de merlot, 25 % de cabernet y 25 % de malbec.

Luego se trasvasó a recipientes de arcilla durante dos meses para su fermentación maloláctica sin agregado de bacterias especificas. Finalizados los dos meses se realizó un prefiltrado y se envaso en recipientes de arcilla nuevamente sin agregado de sulfitos en ningún momento de su elaboración.

En diciembre se traspaso el contenido, previo filtrado manual, a botellas de 750 ml sin agregado de sulfitos para estibarlo en bodega. El fraccionamiento del vino se realiza, en función de la demanda del mismo, en botellas de 250, 350 o 500 ml.
Bodega: Viñedos del Utópico
Zona: Carmen de Patagones – Buenos Aires

Color: rojo rubi con matiz violeta de brillo medio y alta intensidad.
Aroma: frutado de fruta negra, ciruela y toques balsámicos; con buena integración de su alcohol. Volumen medio de aroma.
Sabor: firme y estructurado, con ataque semi dulce y media acidez. En la boca presenta correcto equilibrio de tendencia centro - atrás, con taninos presentes, leve aguja esfervecente y baja sensación de astringencia al final de la cata. Su graduación alcohólica es de 13,6º, con cuerpo medio, elegante, y persistencia media.

Valor: $ 1500 (botella de 350 ml)
Mi Opinión: Bueno



Conclusión: Utópico y estructurado Blend Patagónico desde Carmen de Patagones (Bs As) que presenta aromas a fruta negra, ciruelas y toques balsámicos. En la boca se comporta firme con buen equilibrio y baja sensación de astringencia. Cierra con cuerpo medio, elegante, y persistencia media.
En Febrero del 2010 nace el Blog del Vino Patagónico, orientado a difundir los vinos de la Región y ofrecer un punto de vista alternativo sobre los Vinos Argentinos. Soy un simple consumidor de vino “informado” y por ello investigo, visito bodegas y hago catas sistemáticas de diversos vinos. 

lunes, 22 de mayo de 2023

OIR Syrah 2021 de Bodega Favretto.

OIR Syrah 2021 

de Bodega Favretto.

Syrah el de la Última Cena...
OIR Syrah.

OIR Syrah 2021.

Bodega: Favretto
Zona: Valle Azul - Río Negro

Color: rojo bordó de brillo medio y alta intensidad.
Aroma: frutado de fruta negra con toques especiados y terrosos, muy buena integración de su alcohol. Volumen medio de aroma.
Sabor: firme y austero, con ataque seco y media acidez. En la boca presenta correcto equilibrio de tendencia centro - atrás, tánico y con media sensación de astringencia al final de la cata. Su graduación alcohólica es de 13,2º, con cuerpo alto, rico, y persistencia media.

Valor: $ 2400
Mi Opinión: Buena

Conclusión: Austero Syrah patagónico desde Villa Regina (Río Negro) de aromas a fruta negra, con toques especiados y terrosos. En la boca se comporta firme, con un correcto equilibrio y media sensación de astringencia. Cierra con cuerpo alto, rico, y persistencia media.
Publicado en
Blog Fabián Mitidieri.
El blog del vino patagónico.

domingo, 21 de mayo de 2023

La moda de los tintos ligeros no es una moda: ¿cómo elegirlos?

 


La moda de los tintos ligeros no es una moda: ¿cómo elegirlos?

La variedad de uva es una de las claves. La botella, otra. En esta nota repasamos algunos puntos destacados de estos vinos que ganan espacios en las copas.

Por Joaquín HIDALGO.

Atrás quedaron los días en los que un tinto sólo se podía beber con cuchara, en que los vinos si no eran masticables no eran vinos y en donde la mermelada untable para el paladar era todo lo que estaba bien. Hoy campea toda una oferta de tintos entre ligeros y etéreos que le bajaron los esteroides a la góndola. Y eso está bien.
Atrás quedaron los días en los que un tinto sólo se podía beber con cuchara, en que los vinos si no eran masticables no eran vinos y en donde la mermelada untable para el paladar era todo lo que estaba bien. Hoy campea toda una oferta de tintos entre ligeros y etéreos que le bajaron los esteroides a la góndola. Y eso está bien.

Están quienes afirman que es una moda. Pero lejos de ser algo pret-a-porter, pasajero y de temporada los tintos ligeros y de cuerpo medio son una muestra de maestría: hacerlos bien, que luzcan entallados y que no se les note la hechura es el verdadero desafío. Un ejemplo sencillo: cuando hay estructura y cuerpo, cualquier dulzor y alcohol elevado quedan balanceados; cuando no hay otra cosa que el sabor, cualquier desbalance se nota enseguida. Más en zonas solares como las nuestras.

Y no solo por el parque varietal. Hacer tintos ligeros con Malbec o Cabernet requiere especial atención, mientras que darles vida con uvas como Pinot Noir, Bonarda, Criolla o la rara Bequignol parece más lógico, aunque escaso. Así las cosas, a la hora de beber tintos hoy campea en la góndola una sana propuesta en el punto medio entre los tintos enjundiosos y los blancos. Son, para decirlo en fácil, los tintos sutiles que da gusto beber para la sed, para las comidas y para terminar una comida repasando el último codito de pan sobre las salsas.

¿Ahora bien, cómo elegirlos? Algunos indicios a tener en cuenta, son:

Las variedades. El principal indicio de los vinos más ligeros y gastronómicos es la variedad de uva. Mientras que a un Petit Verdot y Tannat es prácticamente imposible llevarlos a un estilo ligero, es igualmente imposible hacer una Criolla, un Pinot Noir y un Bequignol con estructura y cuerpo. Es que la variedad es determinante de la estructura de vino en estos casos. La zona gris arranca con las variedades bordelesas, como Cabernet, Merlot y Malbec; o con las del Ródano, como Syrah. Estas uvas tienden a dar tintos de cierta estructura ya que sirven para ello, pero hay técnicas que las llevan hacia el lado ligero de la fuerza. Si en las etiquetas dice maceración carbónica, por ejemplo, no hay chances de que tenga estructura y será, como uno lo desea, un tinto ligero.

Técnicas para tintos ligeros. Como la idea del productor de un vino es que uno entienda a “botella cerrada” el estilo de vino que ofrece, suele dar indicios de cómo está elaborado. Para beber vinos ligeros hay que evitar estos conceptos: crianza, reserva, roble porque para que todas esas técnicas de crianza sirvan, los vinos tienen que tener cierta intensidad y estructura. Hay que apuntarle, en cambio, a los que no dicen nada de nada o aclaran que están elaborados con: maceración carbónica, maceración en frío o con maceración prefermentativa, también la palabra infusión se está poniendo de moda ene ese sentido. Es verdad, hay que ponerse a leer en detalle, pero son todos índices de ligereza.

El grado alcohólico. Es un índice irrefutable siempre que se lo mire con juicio. Un tinto que tiene entre 14% y 15% es imposible que sea ligero sino quiere saber sólo a alcohol. Entre 11% y 13% es la banda ideal. Claro que se puede dar el caso de un tinto de zona fría que aún con ese grado tenga unos taninos intensos y rugosos, que le quitan toda la gracia. Pero para es eso es importante juzgarlo con la variedad: un Cabernet Franc en ese punto tendrá taninos, ídem un Cabernet Sauvignon. No así Syrah y Bonarda, por caso.

La botella borgoña. Como el Pinot Noir es la variedad que campea en la Borgoña, Francia, la botella sin hombros es precisamente un índice de ligereza. Claro que puede haber casos engañosos, ya que la vestimenta –y eso es la botella– puede disfrazar cualquier estilo, pero en las generales de la ley se cumple. Lo importante es observar la botella, la variedad y el grado. Completado ese panorama es muy difícil pifiarla.

El estilo del productor. Sucede que cuando se llega a este punto es porque uno se ha convertido en un experto. Saber qué estilos elabora tal o cual productor no es para cualquiera. Pero, en la misma sintonía, cuando se bebe un vino que a uno le gusta y lo encasilla entre los tintos ligeros, hay que tomar nota del productor porque casi con seguridad (ojo al casi) repetirá el estilo en otros tintos. ¿Cuándo falla esta idea? Cuando se trate de bodegas con porfolios extensos, que ofrecen un vino para cada paladar.

Publicado en Diario La Mañana del Neuquén.

sábado, 20 de mayo de 2023

En abril los vinos aumentaron 21,3%, casi el triple de la inflación

 NOTICIAS.

En abril los vinos aumentaron 21,3%, casi el triple de la inflación.

Con un alza promedio del 21,3%, los vinos subieron muy por encima de la inflación de abril del 8,4%, según el "Informe de Precios del Mercado del Vino Argentino", realizado por el centro de investigación Vinodata.

Esto sugiere que, en promedio, los vinos han mostrado incrementos por encima del nivel general de precios, que se ubicó en 8,4% el último mes y representa la mayor suba en 21 años.

 La fuerte corrección de los precios del vino en abril llegó después de dos meses en los que los ajustes fueron más bajos que los del Índice de Precios al Consumidor (IPC). En marzo habían aumentado solo 1,7% y en febrero 5,1%.

Sin embargo, entre octubre de 2022 y abril del 2023, el IPV acumuló una variación del 59,2%, mientras en ese lapso la inflación fue del 46%.

"Esto sugiere un posible patrón estacional en las estrategias de remarcación de precios en el sector (o bien una aceleración en el ritmo y/o magnitud de las remarcaciones)", indicaron desde Vinodata.

El relevamiento comprende el monitoreo de los precios de alrededor de 5.000 botellas que cumplen con ciertos criterios mínimos de continuidad en la comercialización, distintos canales de venta, gama de precio, provincia de origen y variedad.

Además del salto en los precios, otro dato que da cuenta del impacto de la inflación es que más del 80% de las botellas relevadas para calcular el IPV registró aumentos, contra 51% en febrero y 28% en marzo.

Del informe también surge que, mientras que hasta el mes de marzo de 2023 el incremento acumulado del IPV fue mayor en las gamas de precios más altas, la tendencia se revirtió a partir de abril.

De hecho, durante dicho mes el IPV correspondiente a todas las gamas de precios de menos de $3.500 subió más de 20%, mientras que las etiquetas de más de $5.000 tuvieron aumentos promedio del 13%.

En términos de variedad de la uva, los vinos naranjos (77%) y rosados (64%) fueron los que más aumentaron, en tanto que los vinos dulces fueron los que menos subieron (44%) durante ese período.

A nivel provincias también se observó cierta heterogeneidad: aquellas que sufrieron mayor aumento acumulado de precios entre octubre de 2022 y abril de 2023 fueron Neuquén (68%), Río Negro (63%) y San Juan (62%), mientras que los vinos salteños fueron los que registraron los incrementos más bajos (55%).

En este sentido, el ranking de precios por provincia de origen lo encabezan el grupo de "emergentes" (los precios promedio se ubican en $ 5.400), seguidas de Río Negro (alrededor de $ 4.500).

Los de Mendoza, la provincia con la mayor incidencia en producción vitivinícola, promedian los $ 3.700 y los vinos de San Juan ($ 1.450) y La Rioja ($ 1.964) son los de menor precio relativo.

Publicado en Diario LA PRENSA.

https://www.laprensa.com.ar/529842-En-abril-los-vinos-aumentaron-213-casi-el-triple-de-la-inflacion.note.aspx

martes, 9 de mayo de 2023

Bodega y Viñedos “Cepa Roja” de José Sánchez Carrillo.

 


Bodega y Viñedos “Cepa Roja” de José Sánchez Carrillo.

Don José Sánchez Carrillo (1919 – 1985), nativo de la ciudad de Bilbao, comunidad autónoma del País Vasco en el extremo septentrional de la Península Ibérica, llega a la Argentina en el año 1946; tras recorrer distintos lugares del país, se instala definitivamente en la zona del Alto Colorado, valle de Peñas Blancas, vértice Noroeste de la Provincia de Río Negro, en 1950. Un lugar donde un hombre acostumbrado al duro trabajo de la tierra no podía fracasar.
En el kilómetro 14 de la ruta provincial 316 adquiere una fracción de tierra virgen, encarando una titánica lucha contra los médanos de arena que devoraban la fertilidad del suelo con sus áridas lenguas; y empieza a batallar así una ilusión frente al sendero incierto del albur.
Fueron tiempos de trasudar angustias desde el rayar del alba hasta cuando el resplandor crepuscular del río Colorado orillaba las áureas arenas sobre las rubias eras y la noche irrumpía abriendo su gran corimbo de estrellas. Comienzos duros pero que despertaban esperanzas, y era la esperanza la que espoleaba a los inmigrantes. ¡Sus sueños estaban en la tierra!
Una vez desmontada y puesta bajo regadío la tierra virgen, implanta su mayor superficie con vides de variedades diversas: Merlot, Pinot negro, Pinot Joubertin (cepa identificada por los ingenieros Atilio Cassino y Alcides Llorente del INTA E.E.A. “Alto Valle”), Fer, Tempranillo, Balsamina, Malbec, Bonarda, Buonamico, Torrontés riojano, Pedro Giménez, Sauvignon blanc y Semillón. Al mismo tiempo comienza a construir su bodega.
A la propiedad agrícola don José la denominó “El Cortijo del Curro y el Petete”, en alusión a sus hijos Roberto y Jorge.
Así, cuando corrían las abiertas nubes sobre la suspirante planicie del verano del año 1954 y las uvas maduras arrancadas de los racimos rindieron a los labios la carga de dulzura, fueron acarreadas al lagar para ser transformadas en ese caldo violento, ansioso de perfección. Y, entonces, la familia Sánchez Carrillo ebria de euforia comienza a beber ilusiones.
A partir del año 1958 la bodega quedó registrada en el Instituto Nacional de Vitivinicultura bajo el N° N – 70357.
En la niebla soleada de las mañanas invernales las manos de don José hechas tijera hacían sentir su repiqueteo al unísono entre los enmarañados sarmientos cubiertos por los cristales dispersos de la escarcha; y así iba avanzando, con la frente cruzada por los zurriagos de hielo, entre las hileras iguales y diversas como los seres humanos. Al respecto, don José tenía bien internalizado el aforismo que reza: “Viña enfriada con hielo, vino llovido del cielo”.
Mientras su esposa, doña Ilda Estela Tossi (1918 – 1992), con entrega generosa a la enseñanza ha ejercido la más digna actividad en función de los demás durante 40 años. Fue maestra y directora de la Escuela Nº 119 “Primeros Pobladores” de Peñas Blancas hasta su jubilación; asimismo, ejerció el cargo de Jueza de Paz desde el año 1958 hasta su fallecimiento en 1992.
Queriendo ahogar los reclamos de la memoria que pulsaba pasados sentimientos, don José retorna a su querida patria en el año 1978 y al encontrarse con su casa natal siente de repente un raro envaramiento de su corazón.
Ha sido una persona en permanente movimiento como las nubes y el viento y hasta el mismo vendaval crujiente quedó apresado entre sus músculos.
Fue en una de esas noches pintadas de luna llena que reverberaba su luz sobre las aguas encrespadas del Colí leuvú cuando don José suspiró el secreto que quedó grabado en el silencio incesante y perpetuo de los riscos blancos.
El viñedo siguió ampliándose con los años hasta alcanzar una superficie de 15 hectáreas y la bodega quedó incorporada al paisaje cultural del valle de Peñas Blancas.
Los vinos eran expendidos con la tradicional marca Cepa Roja, la que rápidamente se acreditó en el mercado regional.
Al fallecimiento de don José se hace cargo de la bodega su hijo Jorge, quien introduce innovaciones tecnológicas en el proceso de elaboración y pone a la venta los vinos Sánchez Carrillo Línea Varietal y Sánchez Carrillo Línea Vinos Finos Genéricos, tintos y blancos. La bodega, asimismo, fue ampliada alcanzando una capacidad total de vasija de 375.000 litros de vino. ¡Nuevas pisadas sobre viejas huellas!
Como no recordar esa vendimia especial del Tempranillo 1996, un vino de color rojo intenso con un profundo reflejo naranja, levemente almendrado, de buen cuerpo, taninos amables, acidez equilibrada, con un regusto fresco, de sabor armónico y aterciopelado. Un vino para meditar.
En el año 2004, luego de medio siglo de actividad ininterrumpida esta bodega suspende el proceso de elaboración, comercializando su producción de uvas. A principios del año 2014 son sus hijos Jorge Gabriel y Belén, quienes retoman con renovado brío la historia familiar y ponen nuevamente en marcha la actividad vitivinícola continuando con el prestigio forjado por su abuelo don José Sánchez Carrillo y su papá Jorge.
Agradezco al amigo Jorge Sánchez Carrillo el envío de los datos familiares. Asimismo, un recuerdo muy especial a quien fuera el Ing. Agr. Roberto “el Gallego” Sánchez Carrilo (1946 – 2019) con quien he compartido la habitación en el internado de la Facu, vivencias, cursados y momentos de estudio. Una persona excepcional, poeta, guitarrero, recitador y cantor. Había sido declarado Ciudadano Ilustre de la ciudad de Catriel. También lleva su nombre el Centro Cultural de la mencionada localidad.

fiches de bordelesas de vino de la Patagonia Norte" de Federico Witkowski. Imagen: fiches de bordelesas de vino de la Patagonia Norte" de Federico Witkowski.