La tercera generación de este histórico establecimiento de Villa Regina celebra su aniversario con un blend de grandes cosechas, una botella magnum de 1.5 litros, partida limitada de 1.900 unidades. Cuatro añadas distintas y dos variedades de uvas.
Quien viva o haya andado por la zona del Alto Valle de Río Negro, conoce la Bodega Favretto. Productora histórica de vinos en damajuana en Villa Regina. En los últimos años y de la mano de Gustavo Favretto, tercera generación de la familia, se volcó a la producción de vinos de alta gama para dar un viraje. Y reinventarse.
Para ello, no sólo contaron con la capacitación que Gustavo realizó en Europa y EEUU estudiando específicamente las variedades que mejor se desarrollan por aquellos lares, sino que también debieron reconvertir viñedos e invertir en tecnología. “Hubo que hacer una fuerte apuesta, porque continuar con los vinos comunes de mesa era ir a la desaparición”, señaló Gustavo, nieto del fundador Ferruccio Favretto.
¨Una característica distintiva de nuestros vinos finos son el tiempo de guarda, considero que pocas bodegas dejan los vinos en estiba más de 24 meses como hacemos nosotros. Esto es algo que traje como premisa de España, allá se los deja hasta 36 meses en estiba antes de sacarlos a la venta, esto no es un capricho, el vino se vuelve más suave al paladar, detalla.
La elaboración de vinos de mesa fue la fortaleza de la vitivinicultura regional. A partir de los 70, comenzó con su caída: cambió la matriz productiva y muchos viñedos fueron levantados para plantar peras y manzanas. En aquellos años, Río Negro se posicionaba entre las cuatro primeras provincias en cantidad de viñedos.
Por eso desde hace unos años, Gustavo viene investigando. Creó una línea de varietales producido con uva propia y de una región rica y cercana como es la de Valle Azul, a unos 30 kilómetros de la ciudad.
Todas las líneas de vinos Premium tienen un detalle distintivo, algunos barricas, otros duelas o chips. La idea es jugar con los elementos disponibles y buscar aromas impares y cada vez más complejos. En este segmento se encuentra la línea OIR, OIR es RIO al revés, por RIO NEGRO. ¨En la etiqueta tiene un ecualizador, para hacer un juego de palabras”, resalta. Esta línea la conforman el Merlot, Cabernet Sauvignon y Sauvignon Blanc, considerados por críticos del vino como etiquetas con muy buena tipicidad, aromas profundos y excelente relación precio calidad.
El joven destaca que mientras elaboran vinos de mejor calidad, mantienen la línea de vino en damajuana. Y es que, en las mesas de la gente de la zona nunca dejaron de tomarlo. Gustavo agrega que esta línea “ha sostenido a nuestra familia durante años”.
Acerca de los vinos varietales, informa que están en 20 mil botellas anuales que comercializan en vinotecas de distintos puntos de la Patagonia, Buenos Aires, Santa Fe y Corrientes .
Si hablamos de su línea reserva también tuvo muy buena repercusión un Pinot Noir del que hicieron 4,000 botellas. Un vino suave y elegante. Que se agotó rápidamente.
Otra virtud para remarcar es que todos sus vinos son partidas limitadas.
La vedette de la línea, el Ferrucio Favretto (nombre en honor al abuelo y fundador) es un blend de malbec, de tres añadas distintas, 70% Malbec 2010, 10 % Malbec 2012 y 20% Malbec 2013.
No hay comentarios:
Publicar un comentario